JOSE ANTONIO FIDALGO SANCHEZ / MANUEL RAMON FERNANDEZ PEREZ
Si la Ciencia busca el qué, el cómo y el porqué de los hechos, sean naturales o artificiales, la Tecnología está llamada al saber cómo hacemos las cosas, por qué las hacemos y cuál será su utilidad en favor del bienestar de las gentes, de su progreso social y económico y de la convivencia entre los pueblos.
La Tecnología, pues, abraza en una sola finalidad tres objetivos fundamentales: saber hacer, saber por qué se hace y saber para que se hace. La propia esencia conceptual de esta materia le concede una posición privilegiada para formar ciudadanos autónomos en un mundo global con la capacidad, disponiendo de los actuales medios informáticos de comunicación, para resolver problemas con la máxima inmediatez y amplísimos componentes de innovación.