Esta investigación de índole histórica trata sobre el desarrollo de la participación de los evangélicos en la política latinoamericana del siglo XX. El libro, coeditado con la Facultad de Ciencias Sociales de la UNMSM, está estructurado en cuatro partes, las cuales muestran los modos particulares como la comunidad protestante se ha vinculado al poder. La primera analiza la participación política partidaria de los evangélicos en el Perú; la segunda, el impacto regional de los misioneros John A. MacKay y Samuel Guy Inman; la tercera, la realización de los congresos evangélicos continentales, y la cuarta, las percepciones de lo protestante en José Carlos Mariátegui y Víctor Raúl Haya de la Torre. Con ello se demuestra que el protestantismo siempre defendió la prevalencia del sistema democrático, en tanto era la base para su trabajo pastoral y misionero, y la garantía de un pluralismo religioso y político.
