LILIAN FLORES BELTRAN / PEDRO BERRUECOS VILLALOBOS
El oído es un instrumento básico para la comunicación, por lo que los niños preescolares con problemas parciales o totales de audición deben ser diagnosticados rápidamente para iniciar un programa terapéutico pedagógico. De no ser así, se genera un serio obstáculo en la adquisición del lenguaje y en el desarrollo de las facultades superiores del cerebro.
Lograr que un niño sordo aceda al lenguaje es una tarea difícil, prolongada y algunas veces incomprendida, pero conlleva una clara conciencia de solidaridad social; de ahí la importancia de la participación de los padres en las terapias, quienes podrán integrar actividades a su vida cotidiana, con apoyo educativo, asesoráis, guiás para rehabilitación activa de sus hijos.
En esta obra se proporcionan al padre de familia, al médico, al maestro especialista en audición y lenguaje, así como a quienes estudian este campo, una guía que facilita la clasificación de conceptos y el empleo de la metodología especial para trabajar el oralismo en la sección maternal.
Una mejor armonía del núcleo padre-niño-medico-maestro puede permitir el acceso social del niño sordo, habilitándolo para que se desenvuelva en la vida como cualquier individuo, sin limitaciones en su desarrollo personal y social.